Luego de período de relativa calma, la tregua se quebró en la madrugada del primer día de la semana, el domingo, con la ejecución sumaria de Máximo Alem, cuyo cuerpo fue hallado semi enterrado en un sector alejado de Zanja Pyta.
Un poco más de 24 horas después, ya con aristas mucho más violentas, se sumó la segunda víctima fatal de la semana, el sub oficial mayor de la Policía Nacional Claudio Rojas (35) quien, faltando unos 20 minutos para las 11:00, se desplazaba al mando de su vehículo sobre la calle Cerro León a la altura de Ytororó, Barrio San Blas.
En dicho lugar Rojas fue emparejado por dos sujetos montados en una motocicleta, uno de los cuales vació el cargador de su pistola 9 milímetros sobre la camioneta del policía, una Toyota Runner, color borra de vino, placas AUL 208 PY, la cual acusó 16 impactos, cinco de los cuales fueron a dar por el tórax de la víctima que, aún con vida, fue trasladada hasta un hospital privado, donde a pocos minutos de ingresar falleció como consecuencia de la hemorragia aguda que le causaron los disparos, esto de acuerdo al laudo expedido por la médica forense Mildre López.
El finado de turno pertenecía a la Brigada de Investigación de Delitos y estaba destacado en la unidad policial de Yby Yaú, dependiente de la jefatura departamental de Concepción.
El sub oficial mayor Rojas residía en el barrio Jardín Aurora, hacia donde allí se dirigía en momentos de ser abordado por los sicarios, desconociéndose hasta el momento el móvil del crimen, aunque la hipótesis más fuerte es la de un ajuste de cuentas.
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