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miércoles, 1 de septiembre de 2010

La "Tierra de nadie" ahora es de Chico Cunha

Ante la “diplomática y acomodada” postura de nuestras autoridades, paraguayas, el “patrao Chico”, Cunha, con autorización de Flavio Kayatt, Helinho Peluffo y del propio gobernador Puccinelli (quien una vez dijo tener raíces paraguayas), continúa desenvolviendo su proyecto de urbanización y plantación de eucaliptos sobre sectores de la franja de frontera seca que son de exclusivo dominio de la Comisión Binacional Demarcatoria de Límites.  

Mientras tanto el gobernador- a entender de mucha gente defendiendo lo indefendible-  excomulgó de culpa y pena a su socio Puccinelli con la salomónica apreciación de que “habló como político”.

Esto sin duda deja un precedente hasta si se quiere preocupante, porque si nuestra máxima autoridad departamental justifica que “como político” se pueda alentar atropellos de esta naturaleza, ordenar el pisoteo impune leyes y tratados y hasta pedir protección policial para los autores, entonces como “político” cualquiera podrá hacer lo que quiera.

Mientras tanto en el correr de las últimas horas, un interminable ir y venir de camiones de “seu Chico” continuó con la descarga de tierra dentro de un acordonado central de concreto que “políticamente” divide al medio al propio hito demarcatorio.  

Los trabajos de referencia se iniciaron y continúan, y no pasan de una desesperada e impotente represalia del tal “Chico” -según él mismo manifestó a la prensa - para cerrarle el paso directo desde Ponta Pora a Pedro Juan de los compradores brasileños a la altura del “Marco Grande”, pensando con esto que impedirá que sus actuales clientes pasen a surtirse de combustibles de igual calidad y 30% más barato, en la nueva estación de servicios Petrobras que, del lado paraguayo, entrará en funcionamiento en poco tiempo más.

Por otro lado una minoría de comerciantes pontaporanenses, muchos de los cuales hoy tienen una vida acomodada gracias a lo que ganaron en otros tiempos con la clientela paraguaya, reclaman desde hace largo rato, que el comercio paraguayo realiza una “competencia desleal”, alegando la diferencia de precios ofertados en nuestra ciudad con relación a Ponta Pora , a pesar de saber, y muy bien,  que el problema en sí está en la dura carga tributaria a que se ven sometidos sus productos por parte de su gobierno.

El presidente paraguayo de la Comisión Binacional Demarcadora de Limites, Enrique Jara Ocampo, había manifestado que las autoridades paraguayas (de Asunción) ya habían pedido la paralización de las obras.
Sin embargo esta sigue con todo ímpetu ante la complaciente postura de nuestras autoridades, esas mismas que muchas veces se jactan de su patriotismo y se ponen la cintita tricolor por la solapa cada 14 de Mayo, pero que a la hora de la verdad- como en este caso- simplemente se hacen las desentendidas. amambay ahora.com

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